Desde la costa, más precisamente desde la
ciudad de Manta tomé el camino hacia la sierra, pasando por Portoviejo y desde
allí a Santo Domingo donde pase la noche. Si bien Ecuador es un país pequeño,
los distintos accidentes geográficos hacen que distancias que podrían hacerse
en pocas horas, terminen demorando bastante más.
La ruta hacia Quito es realmente muy hermosa,
la charrúa subiendo lentamente ya que la altura comienza a sentirse. Muchísima
vegetación, curvas muy pronunciadas, y de repente ríos y cascadas que me
sorprendían